Por Víctor Cruz
Sin embargo, corre el riesgo de absorber excesivamente las energías de la libertad.
Por eso, el paso de la economía a la política es necesario. Ciertamente, el término “política” suscita muchas confusiones que deben ser esclarecidas. Sin embargo, es cosa de todos sabida que, en los campos social y económico – tanto nacional como internacional – la decisión última corresponde al poder político.
Este poder político, que constituye el vínculo natural y necesario para asegurar la cohesión del cuerpo social, debe tener como finalidad la realización del Bien Común. Respetando las legítimas libertades de los individuos, de las familias y de los grupos subsidiarios, sirve para crear eficazmente y en provecho de todos las condiciones requeridas para conseguir el bien autentico, y completo del hombre, incluido su destino espiritual.
Se despliega dentro de los límites propios de su competencia, que pueden ser diferentes según los países y los pueblos. Interviene siempre movido por el deseo de la justicia y la dedicación al Bien Común, del que tiene la responsabilidad.
Demandamos una constitución de la República que establezca:
· Un régimen económico plural, que reconozca las diferentes formas de propiedad: pública, privada y social; así como las distintas formas de organización económica: privada, estatal, mixta, popular y solidaria.
· La distribución del ingreso y la riqueza, como garantía del desarrollo humano sostenible.
· La función social como el límite a cualquier iniciativa económica.
· La responsabilidad de todos los sectores económicos: público, privado y social, en el desarrollo económico nacional, tendente al incremento del bienestar social y al trabajo digno para toda la clase trabajadora.
· El fomento de la producción nacional como factor determinante en la garantía de la soberanía alimentaria.
· La protección estatal del derecho al trabajo y reconocimiento de todas las modalidades de trabajo: en relación de dependencia o autónomas, con inclusión de labores de autosustento y cuidado humano, y como actores sociales productivos, a todas las trabajadoras y trabajadores del campo y la ciudad.
· El deber estatal de fomentar y proteger la creación y el desarrollo de la economía solidaria, integrada por las cooperativas, las empresas rurales asociativas, los fondos de ayuda mutua, los fondos rotatorios de crédito, las empresas familiares y cualquier otra forma de asociación comunitaria para el trabajo, el ahorro o el consumo.
· La garantía estatal a la igualdad de derechos y oportunidades de mujeres y hombres en el acceso a la propiedad, factores de producción y mercados de trabajo, impulsando políticas especiales dirigidas a erradicar la desigualdad y discriminación hacia las mujeres en el ámbito económico.
OTRAS PROPUESTAS
· El Estado debe impulsar el intercambio justo y complementario de bienes y servicios transparentes y eficientes.
· El Estado establecerán un marco regulatorio para el funcionamiento del sector de la economía solidaria.
· El reconocimiento y la garantía del derecho al trabajo bajo todas las modalidades: en relación de dependencia o autónomo, con inclusión de labores de auto sustento y cuidado humano, como actores sociales productivos a todas/todos los/las trabajadores/as.
· El Estado debe fomentar la creación y el desarrollo de la pequeña y mediana industria, las cooperativas, las empresas rurales, asociativas, los fondos de ayuda mutua, los fondos rotatorios de crédito, las empresas familiares y cualquier otra forma de asociación comunitaria para el trabajo, el ahorro y el consumo.
· Incorporar la democratización de los factores de la producción, mediante el fomento a la producción nacional, el acceso de las mujeres a los factores de producción y evitando el acaparamiento de los factores de producción.
· La distribución del ingreso y la riqueza, como garantía del desarrollo humano sostenible.
· La función social como el límite a cualquier iniciativa económica.
· La responsabilidad de todos los sectores económicos: público, privado y social, en el desarrollo económico nacional, tendente al incremento del bienestar social y al trabajo digno para toda la clase trabajadora.
· El fomento de la producción nacional como factor determinante en la garantía de la soberanía alimentaria.
· La protección estatal del derecho al trabajo y reconocimiento de todas las modalidades de trabajo: en relación de dependencia o autónomas, con inclusión de labores de autosustento y cuidado humano, y como actores sociales productivos, a todas las trabajadoras y trabajadores del campo y la ciudad.
· El deber estatal de fomentar y proteger la creación y el desarrollo de la economía solidaria, integrada por las cooperativas, las empresas rurales asociativas, los fondos de ayuda mutua, los fondos rotatorios de crédito, las empresas familiares y cualquier otra forma de asociación comunitaria para el trabajo, el ahorro o el consumo.
· La garantía estatal a la igualdad de derechos y oportunidades de mujeres y hombres en el acceso a la propiedad, factores de producción y mercados de trabajo, impulsando políticas especiales dirigidas a erradicar la desigualdad y discriminación hacia las mujeres en el ámbito económico.
OTRAS PROPUESTAS
· El Estado debe impulsar el intercambio justo y complementario de bienes y servicios transparentes y eficientes.
· El Estado establecerán un marco regulatorio para el funcionamiento del sector de la economía solidaria.
· El reconocimiento y la garantía del derecho al trabajo bajo todas las modalidades: en relación de dependencia o autónomo, con inclusión de labores de auto sustento y cuidado humano, como actores sociales productivos a todas/todos los/las trabajadores/as.
· El Estado debe fomentar la creación y el desarrollo de la pequeña y mediana industria, las cooperativas, las empresas rurales, asociativas, los fondos de ayuda mutua, los fondos rotatorios de crédito, las empresas familiares y cualquier otra forma de asociación comunitaria para el trabajo, el ahorro y el consumo.
· Incorporar la democratización de los factores de la producción, mediante el fomento a la producción nacional, el acceso de las mujeres a los factores de producción y evitando el acaparamiento de los factores de producción.
2 comentarios:
EL CLUB DE AYUDA MUTUA
EL CLUB DE AYUDA MUTUA ES UNA PLATAFORMA DE TRANSFORMACIÓN SOCIAL ALGO INÉDITO Y NUNCA HECHO
SOMOS EMPRENDEDORES SOCIALES. Y CAPACES DE GENERAR ENERGÍA Y TRANSFORMACIÓN SOCIAL EFECTIVA YA QUE AMPLIAMOS EL MUNDO DE LAS OPORTUNIDADES
HEMOS DESARROLLADO ESTE CLUB DE AYUDA MUTUA PENSANDO EN TODAS LAS PERSONAS QUE ESTÁN QUERIENDO OBTENER BENEFICIOS Y CREAR RIQUEZA, SEAN NACIONALES O FORÁNEOS.
HACER DE LA ECONOMÍA UN LUGAR PARA TODOS, AUMENTAR LOS INGRESOS Y REDUCIR LA POBREZA, YA QUE VIVIMOS EN UNA ECONOMÍA DE GUERRA, PERO LA GUERRA ES CONTRA NOSOTROS, POR ESO DEBEMOS APOSTAR A LA IMAGINACIÓN.
ESTAMOS ABRIENDO UNA VENTANA ÚNICA DE OPORTUNIDADES INÉDITAS Y ES IMPRESCINDIBLE ARTICULAR MILES DE ACCIONES TRANSFORMADORAS, HAY QUE CREAR Y LLEVAR A CABO IDEAS IMAGINATIVAS QUE VAYAN POR EL CAMINO DE EN MEDIO, PROPONER ACCIONES MÁS OSADAS PARA VER UN SOSTENIDO DESARROLLO ECONÓMICO.
EL SISTEMA HA FRACASADO, NO RESPONDE A LAS NECESIDADES DE LA GENTE. DEBEMOS EXPANDIR LA AYUDA MUTUA PARA HACER UNA ECONOMÍA MÁS JUSTA Y HUMANA YA QUE OTRA ECONOMIA ES POSIBLE A TRAVÉS DEL DESARROLLO DE LA ECONOMIA SOLIDARIA.
EL CLUB DE AYUDA MUTUA
En el club de ayuda mutua trabajamos codo con codo insistentemente y fomentamos lazos de confianza, con honestidad, solidaridad y valores compartidos.
Hoy, las finanzas éticas son ya un fenómeno de alcance mundial que basa su fuerza en su sencillez: algo tan simple como incorporar explícitamente la ética en las decisiones diarias de ahorro e inversión puede tener un gran efecto transformador.
Siendo emprendedores sociales creamos oportunidades para ayudar a insertar económica y socialmente a la comunidad toda, para ello estamos impulsando un cambio de mentalidad y actitud, que ayude a llegar a un desarrollo comunitario sostenible, creando redes sociales de cooperación entre asociados.
Nuestro reto es crear unas estructuras económicas solidarias no excluyentes, no especulativas, donde la persona y el entorno sean el eje, el fin y no el medio para conseguir unas condiciones dignas para todas las personas.
La solidaridad, la cooperación y la reciprocidad son fuerzas económicas efectivamente existentes en la realidad social.
A nadie se le escapa que estamos inmersos en la recesión, la arquitectura financiera internacional se ha tambaleado. Y el riesgo sistémico permanece. Nada volverá a ser como antes, es hora de abrir los ojos. ¿Queremos más de lo mismo o buscamos una alternativa? decididamente conviene centrarse en la necesidad de hacer reformas.
Nuestro club de ayuda mutua opera desde Fuengirola, Málaga, España con presentaciones y reuniones programadas, si usted desea participar y tener información de primera mano en nuestro centro contacte con:
malarinocarlos@gmail.com
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