UN EVENTO PARA RECORDAR
CONTINUACIÓN
Por Ramón Zabala
El equipo nacional japonés de pelota que jugó en el Clásico Mundial 2da. Versión se coronó campeón del evento. ¡FELICIDADES! No hay dudas que están demostrando superioridad en el campo de juego frente a los conjuntos de naciones que el deporte del madero, la bola y el guante es parte de su cultura y pasa tiempo favorito.
En la nación del SOL NACIENTE no se conoció este deporte hasta que fue introducido por los Estados Unidos de Norteamérica después de la 2da. Guerra Mundial, pero el equipo contendor en la meta final fue el sur coreano, como si todo esto fuera poco el país mayor productor de materia prima para el deporte de los conjuntos y la ley promedio (base y bola) nuestra República Dominicana fue eliminada en la primera ronda del evento, Estados Unidos apenas llegó ala semi-final y otros como Cuba otrora invencible en torneos continentales, recibió una asombrosa humillación.
Yo por mi parte me siento triunfador con el Clásico Mundial de Pelota y no quería que Japón repitiera la hazaña, quiero una corona mundial para nuestra República Dominicana, Venezuela, México o Cuba. No obstante, lo que más me alegra es que el deporte que jugué en mis años mozos adquirió dimensión mundial. FELICIDADES para los europeos participantes en el Clásico especialmente para Holanda por la hazaña de descalificar a Dominicana. Loor al esfuerzo, al sacrificio, a la unidad nacional y la función de equipo. Cuatro elementos que faltaron al conjunto dominicano que nos represento en el Clásico Mundial de Béisbol al igual que al Estadounidense, nación cuna de la Revolución Nacionalista Universal convertido en imperio neocolonial, pero aun así y con el sabotaje de los dueños de los equipos de Grandes Ligas al conjunto dominicano al estadounidense también merece una corona mundial de base y bola. No un súper héroe de la pantalla gigante traído del lejano oriente para fabricar $US (Ninja) necesita conjugar los cuatro factores que nos hace falta a nosotros (los dominicanos). Los equipos de oriente están imponiendo cultura milenaria (clásica) unida en un objetivo común y como naciones de cultura clásica no están para dejarse vencer por reguetoneros. El evento en cuestión es un clásico mundial.
En la nación del SOL NACIENTE no se conoció este deporte hasta que fue introducido por los Estados Unidos de Norteamérica después de la 2da. Guerra Mundial, pero el equipo contendor en la meta final fue el sur coreano, como si todo esto fuera poco el país mayor productor de materia prima para el deporte de los conjuntos y la ley promedio (base y bola) nuestra República Dominicana fue eliminada en la primera ronda del evento, Estados Unidos apenas llegó ala semi-final y otros como Cuba otrora invencible en torneos continentales, recibió una asombrosa humillación.
Yo por mi parte me siento triunfador con el Clásico Mundial de Pelota y no quería que Japón repitiera la hazaña, quiero una corona mundial para nuestra República Dominicana, Venezuela, México o Cuba. No obstante, lo que más me alegra es que el deporte que jugué en mis años mozos adquirió dimensión mundial. FELICIDADES para los europeos participantes en el Clásico especialmente para Holanda por la hazaña de descalificar a Dominicana. Loor al esfuerzo, al sacrificio, a la unidad nacional y la función de equipo. Cuatro elementos que faltaron al conjunto dominicano que nos represento en el Clásico Mundial de Béisbol al igual que al Estadounidense, nación cuna de la Revolución Nacionalista Universal convertido en imperio neocolonial, pero aun así y con el sabotaje de los dueños de los equipos de Grandes Ligas al conjunto dominicano al estadounidense también merece una corona mundial de base y bola. No un súper héroe de la pantalla gigante traído del lejano oriente para fabricar $US (Ninja) necesita conjugar los cuatro factores que nos hace falta a nosotros (los dominicanos). Los equipos de oriente están imponiendo cultura milenaria (clásica) unida en un objetivo común y como naciones de cultura clásica no están para dejarse vencer por reguetoneros. El evento en cuestión es un clásico mundial.
Continuará…
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