APRUEBAN DE URGENCIA PROYECTO DE LEY QUE DECLARA AL CORONEL JUAN MARÍA LORA FERNÁNDEZ HÉROE NACIONAL

SANTO DOMINGO, D. N.- La Cámara de Diputados aprobó de urgencia el proyecto de ley que declara como Héroe Nacional al jefe del Estado Mayor Constitucionalista, coronel Juan María Lora Fernández, quien murió el 19 de diciembre de 1965 en el combate del asalto al Hotel Matum en Santiago de los Caballeros.

La pieza autoría del diputado Víctor Luís Lasosé, representante de la provincia Espaillat, solicita al presidente de la República, doctor Leonel Fernández, en su condición de comandante supremo de las Fuerzas Armadas, que como merecida reparación histórica sea reconocida la designación de Lora Fernández en la Jefatura del Estado Mayor del Ejército Nacional, y que como le corresponde, su fotografía sea colocada en la galería de ex jefes de Estado Mayor de esa institución.

En sus considerandos el proyecto de ley aprobado por los diputados señala que los testimonios hechos por sobresalientes participantes de la gesta histórica de la guerra patria dan cuenta del amor a su país, valor y arrojo exhibido por Lora Fernández en las batallas del puente Duarte y en la toma de la Fortaleza Ozama, así como en los combates del Hotel Matum.

Igualmente indica que mediante el Decreto No. 442-2003, de fecha 1ro. de mayo de 2003, el coronel constitucionalista fue ascendido póstumamente a general de brigada del Ejército Nacional en reconocimiento a sus méritos, y que el Ayuntamiento del Distrito Nacional mediante la Resolución no. 111-2002 designó varias calles con su nombre, al igual que también lo hicieron los ayuntamientos de Pedernales, La Vega y San Francisco de Macorís.

Lora Fernández fue designado Jefe de Estado Mayor del Ejército Constitucionalista en abril de 1965 por el presidente Francisco Alberto Caamaño Deñó, como está sustentado en múltiples documentos, y testimoniado por actos vinculados a los comandos constitucionalistas que sobrevivieron a la gesta patriótica de abril.

Su designación por Ley como Héroe Nacional se considera como un merecido reconocimiento a su empeño en reivindicar la Constitución de la República lesionada tras el golpe de Estado de septiembre de 1963 y a su valentía en la defensa de la soberanía nacional pisoteada por la invasión de tropas extranjeras el 28 de abril de 1965.